Caer entre tus dedos de ilimitada imaginación.
Estallar en reptilianos trozos cuando tu risa resuena en todas partes, enloquecer de golpe, sin darme cuenta estrellarme en un muro tibio.
Revolcarme en el lodo que forman tus pasos, ver girar la tierra, alzarme a romper la cúpula cristalina que estira mi piel.
Flotar y caer, saltar y caer.
En mi cabeza resuenan tus ojos, parpadeos sin lágrimas, azotes de oro, flechazos de pestañas atravesando mis huesos, reduciendome a astillas, sangrientas terribles.
En mis paredes resuenan tus látigos,tus brazos cerrados me borran la historia, me lanzan hacia el final.
Dentro de tus labios se inscribe esta página, se forma eterea, vuela por el cielo y aterriza en mi vena.
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