Extroscopía 73. c)

Nos sacan de esa sala de mierda, no sé porque no metieron ahí.
Nos llevan por un laberinto sin fin, opaco (ocarabinero) y aburrido. Pinta de hospital de tortura.
Ya no voy tan atenta, tengo sueño y estos imbéciles me aburren.
Nos dejan fuera del calabozo, miro hacia dentro, pequeñas camas se han armado algunas.
Estamos al lado del calabozo de hombres, se están riendo y yo de a poco me interiorizo en lo que hablan.
- Eran 6 tortugas ninja loco, no sabía cual era donatello.
(me rio)
- Oye, oiga mi cabo. ¿me puedo fumar un cigarro? ¡NO! ¿Me puedo ir en media hora? ¡NO! aaaaah... ¿y me puedo fumar un cigarro?
(me rio)
- ¿Alo? (susurra) Nah, si ya voy saliendo, me guardai dos copetes?
(me rio)

Las chicas con las que estoy me miran y yo recién aterrizo de nuevo.
Hablamos no se de que un rato.
Sigo con frío.

Llega un verde con cara de querer ser chistoso.
Otro viene atrás.

-Estas son po, entre ellas y las guatonas cachalotas de allá no hay por donde perder o no?
(me enojo, mi cara no lo disimula... si pudiera reventar sus cerebros con mi mente estaría ahogada entre tanto seso esparcido, lo juro)
- Señoritas, (baja la voz) Síganme. (dándose ínfulas de que nos llevaría al salón VIP de su mierda de recinto)
Lo sigo con las manos cruzadas, con ganas de escupirle el casco.
Se acerca, nos dice: Miren, las voy a dejar ir sin multa ya? Si les preguntan algo digan que ya tienen la boleta.
¡Ay gracias, dicen las chicas! Yo voy en silencio, tratando de grabarlo todo en mi mente.
El tipo me mira, se da cuenta de que no me agrada su trato preferencial, se da cuenta de que le tengo un asco feroz, lo miro tan feo que baja la mirada.